Un medicamento sin receta (OTC) no requiere una receta. Algunos ejemplos son la aspirina y los medicamentos para la tos, así como las vitaminas y los suplementos herbarios.
Los medicamentos OTC algunas veces pueden causar efectos secundarios o problemas graves si se toman con medicamentos recetados. Antes de tomar cualquier medicamento OTC, observa las advertencias de seguridad en la etiqueta del envase del medicamento OTC y también la información que viene con el medicamento recetado.
Siempre consulta a tu médico o farmacéutico si no estás seguro sobre el uso de un medicamento OTC.